“Los cafés son uno de los rasgos más característicos de una tierra. El viajante curtido y exquisito que llega a cualquier parte, entra en un café, lo observa, lo examina, lo estudia, reconoce entonces el país en el que está, su gobierno, sus leyes, sus costumbres, su religión.”
Almeida Garret, Viagens na Minha Terra |
Dar la bienvenida a Lisboa es dar la bienvenida a una ciudad cuya luz es una de las más especiales de Europa. Desde lo alto de sus siete colinas, Lisboa saluda a quienes llegan atraídos por el quejido de las guitarras que entonan el hadado destino del fado. Capital milenaria, la ciudad se arregla todos los días para bajar por el tradicional empedrado de empinadas cuestas y callejuelas de múltiples salidas.
Son los barrios antiguos tales como Alfama los que le dan fama de castiza, sus avenidas – como la de la Liberdade– que la visten con elegancia y sus ordenadas calles – como las de Campo de Ourique– que le dan personalidad.
Y si un café dice mucho de una ciudad, entonces está invitado a sentarse en la Brasileira para descubrir los secretos que esta ciudad aún no le haya revelado.
Sea bienvenido a Lisboa
Situada en el estuario del río Tajo, sobre la costa oeste del océano Atlántico, Lisboa es la ciudad capital más antigua del continente europeo. Con tres honorables milenios de historia y el título de capital conquistado en 1147, Lisboa se renueva a sí misma a través de su vida de barrio y de su modernidad multicultural. |
En el distrito de esta ciudad cosmopolita viven aproximadamente 556.797 habitantes, en una área metropolitana que abarca alrededor de 84 km2. Ocupa la zona de Grande Lisboa (las afueras) cerca de 2750 Km2 donde que cuenta aproximadamente 2,1 millones de habitantes. El distrito de Lisboa se divide en 53 juntas de barrio (freguesias), haciendo frontera con municipios como Odivelas y Loures (al norte), Oeiras (al oeste), Amadora (al este) y al sudeste con el estuario del Tajo, también conocido como Mar de Palha (Mar de la Paja), el cual la une a los distritos de Almada, Seixas, Barreiro, Moita, Montijo y Alcochete.
Sobre las Siete Colinas, con un empedrado de calles estrechas y vistas panorámicas en cada rincón, la ciudad se llena de coloridas historias, culturas fascinantes y barrios encantadores, atrayendo una vez más a estudiantes extranjeros que ansían aprender la lengua portuguesa. El corazón de la ciudad está salpicado de barrios acogedores, todos con un sabor propio: Alfama, Chiado, Mouraria, Bairro Alto, Estrela, Belém, Ajuda y otros más que dan color a la ciudad donde las colinas duermen sobre el río. Con un plano en mano, estará listo para abrirse camino.
Dice la leyenda que fue Ulises quien fundó la ciudad, pero la historia es más exacta y laurea a los fenicios con tal mérito allá por el año 1200 a.C. Al pueblo fundador le siguieron los romanos, liderados por Decimus Junius Brutus en la conquista de Lusitania, quienes hicieron de Lisboa una auténtica plaza de comercio.
Con la caída del Imperio romano, los germanos continúan con el saqueo de Olisipo y después de ellos fueron los vándalos en el siglo V, siguiéndoles los alanos y los godos hasta que la ciudad recibe por fin la llegada de Remismundo, en el año 468, que integra Lisboa al Reino Suevo, el cual tenía Braga como capital, otra de las bellas e históricas ciudades de Portugal.
Ulishbona se iría a llamar cuando, en el siglo VI, los visigodos unificaron la Península Ibérica. Aún antes del Cerco de Lisboa en 1147, la ciudad vio a los musulmanes tomar la retaguardia pero con la fuerza de Martim Moniz, que dio la vida por su bella amada, y la astucia de los caballeros de las cruzadas, Don Alfonso Henriques tomará el reinado de la ciudad. Fue el día 1 de noviembre del mismo año. Y Lisboa crece y Don Alfonso III de Portugal, al ver tamaño crecimiento, la nombra capital. Corría el año 1256.
Le siguió el periodo histórico de Los Descubrimientos y Lisboa se convirtió en La Señora de los Mares, disponiéndose así a recibir tanto navegantes de exquisitos gustos llegados de toda Europa como también esclavos de África e hindúes, chinos, japoneses e indígenas de Brasil. Se crean grandes casas de comercio en la capital, la más famosa de todas llamada Casa de la India. El interés por la cultura y construcción de grandes obras acompaña a esta Lisboa de navegantes, siendo ejemplos de ésto el Mosterio dos Jerónimos y la Torre de Belém, construidos al estilo manuelino, el Forte de São Julião da Barra, el Terreiro do Paço y el Palacio Real, más tarde destruido. Es también en aquella altura que las ciencias y las letras alcanzan un notable apogeo, con Luís Vaz de Camões a la cabeza de la Generación de Oro.
Y continuamos hasta el 1 de noviembre de 1755, día de Todos los Santos y cuando se produce, a las 9h40, el terremoto de Lisboa. La ciudad encuentra en el Ministro de Guerra y de los Negocios Extranjeros – de nombre Sebastião José de Carvalho e Melo, conocido por todos como el Marqués de Pombal- una nueva vida. Renace la zona de la Baixa Pombalina, del Terreiro do Paço y de la Praça la Figueira.
Y Lisboa va pasando por los siglos, casi olvidada por el protagonismo anunciado de las ciudades coloniales de Angola y Mozambique, hasta que Fontes Pereira de Melo le renueva el estilo y la lleva al encuentro de grandes empresas. Una nueva Lisboa crece en las Avenidas Novas y en barrios como Campo de Ourique.
Con el 25 de abril viene la Revolución de los Claveles y la modernización. Lisboa se mira en el espejo de ésta que fue la primera operación política de la ciudad y que le dio el envión para ser Capital Europea de la Cultura en 1994. Otros volverían a visitarla en 1988, con la zona oriental reformada y una Exposición Mundial de los Océanos abriendo nuevos horizontes.
Nuevas historias tendrá esta ciudad, donde se cruzan mundos y culturas y sus ciudadanos reciben de brazos abiertos a los extranjeros que la visitan, haciéndolos sentir como en su propia casa. Por eso en See Learning Center, las actividades culturales y los paseos por la ciudad son planeados de forma tan cuidadosa.. Todo de manera a que se lleve consigo, entre tantas otras cosas, el Fado, ese estilo musical tan portugués, que tiene su raíz etimológica del latín factum (destino) y cuyo origen vive escondido en las tabernas de la Mouraria. |
La noche del 12 de junio -noche de fiesta en la ciudad- las Marchas Populares de Lisboa recorren la Avenida da Liberdade: todos los grupos recreativos y asociaciones de los barrios lisboetas recorren la avenida compitiendo por el título al mejor desfile, traje, música y coreografía. La mejor marcha gana un premio. Inspirados en el tema “Lisboa”, los veinte participantes dan cuerpo a un acontecimiento único de la cultura folclórica portuguesa.
En realidad, durante todo el mes de junio, mes de los Santos Populares, las noches de Lisboa se llenan de animados festivales que toman el centro histórico de la ciudad y los barrios típicos. Desde el castillo hasta morería, de Graça a Alfama y de Ajuda al Bairro Alto, todos forman parte de esta fiesta. Las calles se decoran con banderas, iluminadas con centelleantes luces y desbordando música popular por los templetes. Y también las tradicionales sardinas a la parrilla, servidas al plato o en el pan, y el típico manjerico (planta de albahaca) con versos en honor a San Antonio, patrón de Lisboa y santo casamentero. |
En Lisboa, comer fuera es siempre una experiencia maravillosa. La gastronomía tradicional portuguesa significa cultura, imaginación y buen gusto. Desde los restaurantes tradicionales hasta los acogedores cafés, pasando por la cocina internacional, tiene Lisboa una cornucopia de sabores para degustar. Deguste una cena al son de las guitarras que tocan fado, la más tradicional música lisboeta, o pruebe un bife (solomillo) regado con una buena cerveza en las cervecerías tradicionales. |
Deléitese con el paisaje en la zona oriental de la ciudad, la cual ganó una nueva vida para recibir la Expo ’98. Pedaleando en bicicleta o paseando tranquilamente, saque partido del sinfín de actividades en el Parque de las Naciones. Pasee tranquilamente por la Rua Augusta y entreténgase haciendo compras o visitando el Jardín Zoológico, uno de los más antiguos del mundo
La ciudad tiene muchos estadios y a los clubes deportivos se los mima con orgullo. No se pierda la experiencia de ir a uno de sus partidos de fútbol. |
En la época de verano las temperaturas invitan a salir a la calle y disfrutar del ambiente vivido en la ciudad, donde festivales, cines, conciertos, obras de teatro, desfiles y folclore, llenan la agenda con programas que le permiten disfrutar plenamente los días y las noches lisboetas. El histórico barrio que va desde Praça do Comércio hasta Baixa Chiado, la cosmopolita Avenida da Liberdade, así como las más variadas avenidas y calles, se juntan para dar la bienvenida a todos los que en esta ciudad viven o llegan en calidad de visitantes.
Al anochecer, discotecas, pubs y casas de fado dan vida a la ciudad, invitando a todos a disfrutar de buenos momentos.
Para los visitantes, las casas de fado son lugares de paso obligatorio. Deléitese con un tradicional bacalao regado con un buen vino regional y acompañado de las voces y guitarras portuguesas que hacen del fado la inolvidable tarjeta de visita lisboeta. Si prefiere un estilo más sincrético, encontrará restaurantes que acogen artistas, escritores, músicos y políticos de la sociedad portuguesa así como intelectuales de todo el mundo. En esta vieja Lisboa también podrá encontrar el placer de degustar una cocina firmada por chefs portugueses. Para bailar, bien cerca de la zona portuaria, puede contar con buenos DJ’s o por la zona de Santos, con el especial y cosmopolita estilo de sus discotecas. Si le gusta recordar ritmos de otros tiempos, el Hard Rock Café también le espera.
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En Lisboa, infinitas horas de diversión van a su encuentro.
Lisboa tiene de todo. Desde las famosas tiendas de moda hasta el pequeño comercio,
De boutiques diseñadores de moda de renombre a modernos centros comerciales, mercados, etc. Pruebe el contraste entre el comercio tradicional y el moderno. Una de las zonas comerciales más antiguas de la ciudad es la Baixa, que va desde Rossio hasta Rua Augusta y sus perpendiculares, y desde Chiado hasta Avenida da Liberdade. Encontrará fácilmente nombres de calles relacionados con oficios practicados en determinadas calles: Rua da Prata, Rua do Ouro, Rua dos Ferreiros, etc. Con una gran variedad de comercio concentrado, si busca joyas, ropa, accesorios, relojes o recuerdos paras regalo, existe una zona definida que lo espera. Encontrará centros comerciales por casi toda la ciudad: desde los grandes almacenes hasta superficies más pequeñas, siempre a su disposición para satisfacer sus necesidades. Los más importantes abren todos los días entre las 10h00 y las 00h00 (verdaderos paraísos del arte de comprar). |
Moneda: Euro (desde 2002). 1 euro se divide en 100 céntimos. Existen monedas de 1, 2, 5, 10, 20 y 50 céntimos y de 1 y 2 euros. Los billetes se distinguen por su color y tamaño y tienen el siguiente valor: 5, 10, 20, 50, 100, 200 y 500 euros. En Portugal se puede pagar en efectivo, por transferencia bancaria, con cheque o tarjeta de crédito o de débito.
Temperatura: la primavera y el otoño son cálidos (media de 14º C), con sol y alguna nubosidad. Los meses de verano son soleados y calientes aunque con alguna humedad y brisa marítima (las temperaturas varían entre 16º C y 37º C), fruto de la ubicación de la ciudad junto al mar. Los inviernos normalmente son lluviosos y fríos, registrándose a pesar de todo, algunos días de sol con temperaturas medias de 12º C. No suele nevar. De media hay 3.300 horas de sol al año.
Electricidad: 230/400 voltios, en una frecuencia de 50-hertz; en cuanto a los enchufes siguen la normativa europea. El uso de enchufes de lámina (modelo americano) debe combinarse con un transformador de 230 voltios y además, con un adaptador.
Correos: De lunes a viernes de 09.00H a 18.00H. Los puestos de correos de Praça dos Restauradores, Cabo Ruivo y del aeropuerto están abiertos hasta las 20.00H, teniendo durante los fines de semana horarios más reducidos.
Embajadas: De lunes a viernes de 09.00H a 15.00H
Farmacias: de lunes a viernes de 09.00H a 19.00H (algunas farmacias cierran a la hora de la comida), sábados de 09.00H a 13.00H. Cuando están cerradas, todas las farmacias tienen indicación de cuál es la farmacia de guardia más próxima. La farmacia de guardia funciona 24 horas.
Sanidad: Los servicios de emergencia hospitalaria deben usarse exclusivamente en situaciones de emergencia. Para tener acceso a este servicio, los ciudadanos europeos sin residencia en Portugal deben mostrar su pasaporte o D.N.I.
1 cm = 0,39 inches
1 metro = 3,28 feet/ 1,09 yards
1 km = 0,62 miles
1 litro = 0,26 gallons (USA) /0,22 (UK)
Número Nacional de Emergencia: 112
Policía / Oficina de Información Turística de Praça dos Restauradores: +351 213 421 634 / +351
213 421 623
Bomberos: +351 213 422 222
Red Ferroviaria (CP): 808 208 208
Autobuses: +351 213 613 000
Metropolitano: +351 217 980 600
Aeropuerto de Lisboa (llegadas y partidas): +351 216 413 700
“Ask Me” Recepción del Aeropuerto: +351
218 450 660
Línea de Información al Turista: 808 781 212
Llamadas internacionales: 00 + prefijo del país y del área
Prefijo de Portugal: 351